Cuando los "gironins" The Pepper Pots se iniciaron como conjunto en esto de la música, hará cosa de 8 años, lo hicieron guardando fidelidad a una idea, a un concepto perfectamente definido: la música negra de los 60.
Alejados de las comodidades que rodean a aquellos grupos noveles que, todavía con la L y sin saber casi como se cambia de marcha, circulan por la autopista del mainstream, un hecho que si bien suele hacer avanzar rápidamente no en pocas ocasiones termina en un vertiginoso descalabro, el combo de Girona prefirió curtirse previamente por carreteras secundarias, por esas en las que aunque parece que uno va más lento, te permiten aprender y observar con muchísimo más detenimiento y cariño el paisaje que te rodea.
Con su disco de debut, "Swingin' Sixties", editado en el 2004 por el sello de Getxo Brixton Records y tan sólo un año más tarde por los japoneses Ska in the World, fue cuando el grupo se presentó oficialmente en sociedad, envolviéndose para ello en un manto musical claramente influenciado por los ritmos jamaicanos, ska y rocksteady, con colaboraciones de "Rocksteady" Freddie Reiter y Ben Jammin.
Dos años después, y con "Shake It!" (Brixton Records, 2007) bajo el brazo, disco que además de editarse en Japón también cruzó el charco a manos del sello newyorkino Maglith Records, una expedición del grupo se animó a bajar a Barcelona para presenciar la actuación de Sharon Stone & The Dap Kings en la Sala Apolo. Y fue allí donde se gestaron, a raiz de una breve conversación con el guitarrista Binky Griptite (que además se llevó de recuerdo el disco que estos le regalaron), las bases de una futura producción del norteamericano, la de su tercer álbum: "Now!" (Black Pepper, 2009), un disco mucho más soul que evoca de manera espléndida el sonido clásico de Stax y la Motown. Molt grans.
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